Rock in Rio llega a Buenos Aires

Fue una idea que nació en Brasil hace 27 años y que inmediatamente se convirtió en una marca registrada y en sinónimo de rock . Su primera edición tuvo sobre el escenario a Queen, Iron Maiden, AC/DC y Rod Stewart. Y desde entonces sumó nombres como Paul McCartney, The Police, Bob Dylan y Metallica, entre muchos otros. En diez ediciones convocó a más de seis millones de espectadores y ahora, llegará a Buenos Aires con una mega infraestructura que estará lista para abrir la primera edición porteña en 2013 .
Después de abrirse a Lisboa y Madrid, Rock in Rio, uno de los festivales más famosos del mundo, desembarcará en Argentina en la “Ciudad del Rock”, un nuevo predio que se construirá especialmente en un espacio de 180 mil m2 en el Parque de la Ciudad. El megafestival fue confirmado ayer en la capital portuguesa por los organizadores, el alcalde de esa ciudad, António Costa, y el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, durante la última jornada del Rock in Rio en Lisboa.
El anuncio reunió a un centenar de periodistas y se hizo antes de que se abrieran las puertas de la última jornada del evento, en una carpa montada frente al escenario principal del Festival y con claridad del río Tajo de fondo. En el acto estuvieron Roberto Medina, presidente de Rock in Rio; su hija Roberta, vice-presidente de la marca; Macri y su par Costa, el ministro de Cultura y Turismo porteño, Hernán Lombardi, los integrantes de Los Pericos y los de Tan Biónica, las dos primeras bandas argentinas que subieron a un escenario en un Rock in Rio . También parte de los responsables de armar la versión argentina. Fue horas antes del cierre del evento, que despidió su edición Lisboa 2012 con Bruce Springsteen.
Según explicó Medina, la idea de llevar su marca a Argentina era un deseo que tenía pendiente. “Después de Río y Madrid era difícil encontrar una mejor ciudad que Buenos Aires para compartir Rock in Rio con Lisboa”, elogió el alcalde portugués. Macri también destacó la llegada del festival, y aseguró que con su llegada al Parque de la Ciudad, que está cerrado, dará otro sentido al barrio de Lugano. “La Ciudad del Rock arrancará con Rock in Rio pero quedará para toda los porteños . La música es unión, y que eso ocurra en Lugano va a marcar un movimiento nuevo para el público de rock. Va a ser una alternativa para River o Vélez, el grueso de los recitales se van a mudar ahí ”, explicó.
“Sin dudas la Ciudad está a la vanguardia en lo cultural y turístico, y esto se refleja también en traer grandes eventos. Este es global, si querés es como la Fórmula 1 del rock . Y que lo tenga Buenos Aires es un gran atractivo. Además a partir de acá se abren más oportunidades para que las bandas jóvenes argentinas toquen en contacto con las bandas mundiales. Que haya varios escenarios en un mismo festival permite fusiones que son interesantísimas”, sumó Lombardi. Y explicó: “La Ciudad del Rock es un lugar que abre con Rock in Río pero que va a perdurar para otros eventos y para desarrollar un sitio de Buenos Aires que sólo se desarrolla con actividades y flujo, cuando la gente se apropia del lugar”.
La edición porteña ya tiene fecha: según se anunció ayer, arrancará el 27, 28 y 29 de septiembre del año que viene y se extenderá durante el 4, 5 y 6 de octubre. El lugar tendrá las mismas atracciones que su versión portuguesa (con montañas rusas, distintos stands, una “vuelta al mundo” y actividades complementarias a los recitales) y podrá recibir a a 100 mil personas por día. El desarrollo del lugar está a cargo del Ministerio de Cultura, que trabajó en conjunto con un equipo técnico del Ministerio de Desarrollo Urbano. Habrá un escenario principal (para las bandas más convocantes), otro más alternativo donde se dará el cruce entre bandas, una carpa electrónica, la “Rock Street” inspirada en Nueva Orleans y como ícono porteño la Torre Espacial (el mirador más alto de América Latina) será convertido en el Sky Lounge, un restaurante a 200 metros de altura que tendrá capacidad para recibir a cerca de mil personas por día.
La expansión de la marca Rock in Rio no sólo apostará a recibir al turismo joven, sino también a generar puestos de trabajo. También tendrá un fin solidario, a través de acciones concretas, y ecológicas, con campañas que promuevan el cuidado del medioambiente.