No, no es uno de esos casos de excesivo amor por los animales o alguna loca nota de las que acostumbramos publicar…

Algunas tradiciones de nuestro país a veces pueden parecernos demasiado extrañas, pero es porque no nos damos la oportunidad de conocerlas; como es el caso de la celebrada en San Pedro Huamelula, Oaxaca, donde el máximo líder –es decir, el presidente municipal- contrae matrimonio con un cocodrilo.

La curiosa celebración se da para traer buena suerte a los pescadores de la localidad, los cuales organizan toda la fiesta en torno a tan peculiar tradición, en la que –como dictan los cánones- acude la hermosa reptil ataviada con un velo para ser desposada y así cumplir con la ceremonia religiosa y un baile, al que acuden los lugareños.

En esta ocasión el afortunado marido fue Joel Vásquez Rojas - alias el “rey lagarto”- actual presidente municipal de San Pedro Huamelula, pueblo ubicado en la zona del Istmo de Tehuantepec, en el que se tiene la creencia que el cocodrilo hembra representa a una princesa y que su unión con el político hará que el océano Pacífico sea abundante para los pescadores.

“Para la comunidad, esta celebración significa mucho. Es el tesoro más grande que nuestros antepasados nos han dejado”, comentó uno de los habitantes de la localidad, la cual se une para hacer la “vaca” y realizar la fiesta en la que la música banda, cohetes y demás elementos del folclor  están presentes… lo que sí es un poco “exagerado” es que aquel habitante que no le entre a la cooperación es multado… pero así es la tradición.

Aunque se presta para la cábula y para decir que definitivamente es lo mejor que va a poder agarrar un político, definitivamente muchos estarán más de acuerdo en conservar este tipo de tradiciones a la otra “costumbre” que se ha adoptado con respecto a los reptiless: su caza indiscriminada. Según la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) en las zonas costeras de Oaxaca se han reportado ataques de estos animales, razón por la que lugareños los ven como enemigos y los exterminan.

Sin embargo, las autoridades señalan que los cocodrilos sólo son agresivos cuando son provocados, además de que los que llegan a encontrarse en zonas habitadas es debido a que son arrastrados por el golpe de los huracanes o porque su hábitat ha sido invadido por núcleos poblacionales. Por lo anterior, se elaborará  un plan para su catalogación y su posterior ubicación en una zona de reserva.